El Ecuador es uno de los países más ricos en el mundo cuando hablamos de diversidad biológica. La presencia de esta riqueza se debe a los accidentes geográficos como la Cordillera de los Andes y los efectos de la convergencia de corrientes marinas, han generado una diversidad muy alta de ecosistemas y micro climas que se distribuyen desde el nivel del mar hasta los páramos, bosques de neblina y tropicales.
Ecuador es uno de los 17 países donde se concentra la mayor biodiversidad del planeta. Su amplia gama de climas en sus cuatro regiones, ha dado lugar al nacimiento de miles de especies de flora y fauna en medio de extensos territorios naturales. Alrededor de 8.200 especies vegetales existe en la región amazónica, el 10 por ciento de plantas que contiene el planeta. Así mismo con el 8 por ciento de las especies de animales y el 18 por ciento de las de aves del planeta.
Cerca de 3.800 especies de vertebrados han sido identificadas, así como 1.550 de mamíferos, 350 de reptiles, 375 de anfibios, 800 especies de peces de agua dulce y 450 de agua salada. Igualmente, tiene cerca del 15 por ciento del total de especies endémicas de aves en el mundo, las cuales habitan en los Andes, la costa y la región amazónica, principalmente. Las especies de insectos sobrepasan el millón, y las mariposas llegan a las 4.500, entre otras.
Los bosques de neblina se ubican en la franja de los 1.600 a los 3.000 metros sobre el nivel del mar, presentes en las dos estribaciones de la Cordillera de los Andes, en las vertientes Oriental y Occidental.
Estos bosques nublados son el refugio para la supervivencia de varios animales mamíferos, anfibios, reptiles, aves, e insectos que cumplen una función en el medio ambiente. Sin embargo, la tala de los bosques, la cacería, el tráfico ilegal de especies, el abuso agroquímico, son parte de los riesgos que la naturaleza afronta en la actualidad.
La ayuda para buscar la conservación de las especies en peligro de extinción tiene la mano amiga del Sistema Nacional de Áreas Protegidas, de varias organizaciones indígenas, gobiernos locales y propietarios privados que han logrado salvar los últimos remanentes de bosques nublados occidentales y orientales a través de acciones para la conservación de estos bosques. Entre los ejemplos que nombra una revista trimestral Boletín, está la zona noroccidental de la provincia de Pichincha, alrededor del Bosque Protector Mindo Nambillo, la Reserva de Maquipucuna, varias áreas naturales de Mindo.
En la zona centroccidental de Pichincha se encuentra el Bosque Protector Río Guajalito y en la vertiente oriental de la codillera lugares comunitarios como Oyacachi.
Fuente: Revista trimestral Boletín, Cámara de Industrias y Comercio Ecuatoriano-Alemania, marzo 2007